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Ayuda a Calmar los Gases del Bebé: Consejos Diarios

Ayuda a Calmar los Gases del Bebé: Consejos Diarios

Seis pasos simples, pero útiles pueden ayudarte a calmar los gases de tu bebé y a encontrar la comodidad.

Los gases y los bebés parecen ir de la mano. No te preocupes: Es normal. Pero si deseas ayudar a tu bebé con los problemas relacionados con los gases (por ejemplo, si crees que el gas le causa dolor o irritabilidad), trata estos consejos de los expertos.

Checa tu dieta si estás amamantando

Algunos alimentos que pueden estar causando los gases de tu bebé:

  • Frijoles
  • Coliflor
  • Brócoli

La mejor manera de checar si un alimento le está provocando gases a tu bebé es eliminarlo de tu dieta durante unos días y ver si los problemas de gases de tu bebé se mejoran. Si un alimento parece ser la causa, intenta comerlo sólo con moderación.

Mezcla de fórmulas

Si estás usando fórmula en polvo, asegúrate de dejar reposar el biberón recién mezclado durante uno o dos minutos antes de alimentar a tu bebé. ¿Por qué? Cuanto más agites y mezcles, más burbujas de aire entran en la mezcla, que luego tu bebé puede tragar y producir gases.

Prueba una fórmula diseñada para gases

Algunos médicos recomiendan cambiar de fórmula para calmar los problemas de gases. Enfamil NeuroPro™ Gentlease® reduce los gases (junto con la irritabilidad y el llanto) en 24 horas. También es suave para la pancita sensitiva del bebé. Tiene proteínas fáciles de digerir y provee una nutrición completa, incluyendo nutrientes que nutren el cerebro como el DHA, para el crecimiento y desarrollo de tu bebé.

Cambia los biberones para bebés con gases

Algunos biberones están diseñados específicamente para reducir la cantidad de aire que se ingiere durante la alimentación. Si tu bebé tiene problemas con los gases, trata un estilo ventilado, en ángulo o plegable. Asegúrate de sostener a tu bebé con la cabeza elevada en un ángulo de 45 grados e inclina el biberón hacia abajo en su boquita con el chupón lleno de leche, no de aire.

Conoce el chupón que necesita tu bebé con gases

Los chupones vienen en diferentes tamaños (según la edad de tu bebé) y controlan el flujo de la fórmula. Entonces, un chupón para un recién nacido tiene un flujo lento, mientras que uno para un bebé mayor fluye mucho más rápido. Asegúrate de usar un chupón apropiado para su edad.

Si tu bebé ha superado el tamaño de su chupón, es posible que esté aspirando mucho aire con la fórmula, lo que aumenta sus probabilidades de tener dolores por gases. Al mismo tiempo, si el flujo del chupón es demasiado rápido, tu bebé está tragando demasiada fórmula a la vez, lo que también puede causar gases. Haz una lista de suministros para la alimentación del bebé, y trata diferentes tamaños de biberones y chupones hasta que encuentres el adecuado.

Coloca a tu bebé para facilitar la relajación

Mantén a tu bebé en posición vertical durante 20 a 30 minutos después de alimentarlo. Si todavía tiene gases, los eructos pueden ayudar a liberar las bolsas de gas de tu bebé al tragar demasiado aire. Dale palmaditas suaves a tu bebé, comenzando por la parte baja de su espaldita y continúa hacia arriba. Trata una de estas posiciones para eructar:

  • Sostén a tu bebé contra tu pecho (su cuerpo frente al tuyo), con su cabecita sobre tu hombro. Luego dale palmaditas y frota su espaldita.
  • Haz que tu bebé se siente en tu regazo y sostén su pechito y su cabecita con una mano mientras le das palmaditas en su espaldita con la otra mano. Asegúrate de sujetar la barbilla de tu bebé, no su garganta.
  • Acuesta a tu bebé sobre tu regazo, con la pancita hacia abajo. Sostén la cabecita de tu bebé y asegúrate de que esté más alta que su pechito. Frota o acaricia suavemente su espaldita.

Si no puedes producir un eructo en tu bebé con una posición, trata con otra. Sosteniendo una toalla tibia (no caliente) contra la pancita de tu bebé también puede darle comodidad. También puedes tratar de calmar a tu bebé caminando o meciéndote con él, o colocándolo en un columpio o en una silla vibratoria.

Toda la información de Enfamil, incluyendo, pero no limitada a la información sobre la salud, condiciones médicas y nutrición, está destinada a tu conocimiento en general y no substituye la identificación del cuidado médico de un profesional de la salud, consejos o el manejo para condiciones médicas específicas. Debes buscar atención médica y consultar a tu médico o pediatra por cualquier problema específico de salud o nutrición. Nunca ignores el consejo médico profesional ni retrases la búsqueda de tratamiento, atención o ayuda médica debido a la información que hayas leído en Enfamil.