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Bebés, Niños y COVID-19: Mitos vs. La Verdad

Bebés, Niños y COVID-19: Mitos vs. La Verdad

Sabemos que es difícil, muy difícil, encontrar formas de afrontar la situación actual y separar el mito de la verdad.

Si estás abrumada(o) por la gran cantidad de información que existe sobre el Coronavirus, no estás solo. Sabemos que es difícil, muy difícil, encontrar formas de afrontar la situación actual y separar el mito de la verdad.

No podemos restar importancia a los riesgos ni dejar que el miedo nos paralice. Hay varios mitos que han estado circulando en los medios, así como en las redes sociales que aumentan la confusión en lugar de proveer claridad.

Aquí tienes algunos mitos comunes sobre el coronavirus, los bebés y los niños, junto con información objetiva para que puedas informarte y tomar medidas para cuidarte a ti misma y a tus niños.

Mito 1: Los niños no pueden enfermarse por el Coronavirus.

En Febrero del 2020, se hicieron algunos estudios en China que mostraron (en ese país y con un número reducido de casos analizados) que sólo el 2% de los pacientes con COVID-19 estaban en el grupo de edad de 0 a 19 años y que sus síntomas eran benignos en comparación con los síntomas entre los adultos y entre los ancianos. China informó sólo una muerte en el grupo de edad de 0 a 19 años.

Otro estudio preliminar, publicado el 28 de febrero 2020 por la Organización Mundial de la Salud (WHO, por sus siglas en inglés), indicó que esta enfermedad "parece ser relativamente rara y moderada entre los niños” menores de 19 años de edad, ya que se presenta en sólo el 2.4% de los casos.

Con una mayor experiencia con el virus en todo el mundo, quedó claro que los bebés y los niños pueden estar en riesgo.

LA VERDAD: Los niños pueden contraer la enfermedad por Coronavirus, COVID-19.

Los niños no están exentos de contraer la infección por COVID-19, pero no se encuentran en los grupos de mayor riesgo, como los adultos y los que padecen enfermedades cardíacas, diabéticas, pulmonares o inmunodeprimidos. Es posible que tampoco presenten los mismos síntomas clínicos de fiebre o tos y pocos han tenido una necesidad grave de hospitalización. Sin embargo, existen informes de bebés menores de 1 año con enfermedades más graves. Por lo tanto, es importante asegurarse de que todos los niños y adultos se laven las manos y sigan todas las políticas locales y nacionales de distanciamiento, si las hubiera.

MITO: Los bebés pueden infectarse con Coronavirus en el útero o al ser amamantados.

Los primeros estudios han documentado que los bebés nacidos de mamás infectadas con COVID-19 nacieron libres de este virus. También se encontró que el virus no pasa al líquido amniótico ni a la leche materna.

LA VERDAD: El COVID-19 no se transmite a los bebés durante el embarazo ni a través de la leche materna.

Aunque aún se desconoce mucho sobre el COVID-19, no hay evidencia actual que relacione el líquido amniótico o la transmisión del COVID-19 por la leche materna. Pero toma en cuenta que si tú, como mamá, lamentablemente contraes COVID-19, puedes transmitirlo a tu bebé por la vía respiratoria, es decir, respirando cerca de él.

Habla con tu médico sobre las precauciones adecuadas, como el uso de una mascarilla y practicar una buena higiene, pero no dejes de amamantar, ya que la leche materna es el mejor alimento para tu bebé.

En caso de que estés infectada con COVID-19 y te preocupa estar físicamente cerca de tu bebé, otra opción disponible para ti es extraer la leche y pedirle a otra persona que alimente a tu bebé.

Aprende más sobre cómo en Enfamil nos aseguramos de que todas las familias sean alimentadas durante este tiempo, así como las respuestas a las preguntas frecuentes sobre nuestros productos y sobre el COVID-19.

Toda la información de Enfamil, incluyendo, pero no limitada a la información sobre la salud, condiciones médicas y nutrición, está destinada a tu conocimiento en general y no substituye la identificación del cuidado médico de un profesional de la salud, consejos o el manejo para condiciones médicas específicas. Debes buscar atención médica y consultar a tu médico o pediatra por cualquier problema específico de salud o nutrición. Nunca ignores el consejo médico profesional ni retrases la búsqueda de tratamiento, atención o ayuda médica debido a la información que hayas leído en Enfamil.